El Hospital de Santa Cruz ha completado una importante tarea de mantenimiento en sus equipos de respaldo eléctrico, asegurando así la continuidad en la atención médica ante cortes de energía.
La intervención, coordinada con precisión y planificada en conjunto con la red asistencial y profesionales del Servicio de Salud O’Higgins, permitió solucionar una falla en el sistema de transferencia de energía del hospital. Gracias a esta labor, los equipos electrógenos han recuperado su capacidad de automatización, garantizando un funcionamiento óptimo y seguro en caso de cortes del suministro eléctrico.
La tarea, llevada a cabo por una empresa especializada con la colaboración de las áreas clínicas del hospital, se realizó durante la noche para minimizar el impacto en la atención a los pacientes.