La Seremi de Salud de la región de O’Higgins realizó un decomiso de más de 500 kilos de carne de ave, vacuno y cerdo en una carnicería del centro de San Fernando. Estos productos, considerados no aptos para el consumo humano, fueron descubiertos durante una fiscalización llevada a cabo por funcionarios de la Oficina de Acción Sanitaria de la comuna, tras recibir una denuncia a través de la Oficina de Información, Reclamos y Sugerencias (OIRS).
Según lo observado por los fiscalizadores, la carne decomisada se encontraba vencida, por lo que fue incautada, desnaturalizada y posteriormente destruida para evitar riesgos para la salud pública. Este hallazgo ha dado lugar al inicio de un sumario sanitario para determinar las responsabilidades correspondientes.