Aunque las precipitaciones han sido intensas, la región no ha sufrido daños mayores, reflejando una preparación adecuada. La alerta amarilla sigue vigente, con un monitoreo continuo en todas las comunas. Hasta ahora, hay 56 personas albergadas: 10 en Mostazal, 44 en San Vicente y 2 en Chimbarongo. Los principales problemas han sido cortes de suministro eléctrico, caída de árboles y desbordes menores de canales. La situación del tranque Millahue es una de las más preocupantes y está siendo atendida por el ministro de Agricultura junto a equipos especializados.

El director regional de SENAPRED destacó la coordinación entre niveles comunales, provinciales y regionales, lo cual ha sido clave para mitigar los daños. Nueve comunas han reportado afectaciones menores, con un total de 697 personas sin suministro eléctrico y algunas áreas aisladas, como en Doñihue, donde 87 personas esperan la restauración de los accesos.