En mayo pasado, el propietario de una camioneta valorada en 12 millones de pesos se presentó ante la PDI de San Fernando para denunciar una estafa. El dueño relató que había vendido el vehículo a un individuo que lo contactó a través de redes sociales y le pagó con un cheque que posteriormente fue rechazado por inconformidad de firma en el banco.
El supuesto comprador, alegando ser de fuera de la Región de O’Higgins, afirmó que no podía viajar a San Fernando y envió a un sobrino para realizar la transacción. El falso sobrino solicitó a la víctima firmar un poder notarial para facilitar el traspaso del vehículo, un método comúnmente usado por estafadores para revender el bien a terceros.
Tras llevar a cabo diversas diligencias investigativas por instrucciones del Ministerio Público, los detectives de la PDI de San Fernando identificaron que la camioneta estaba en posesión de un hombre de 42 años residente en Chillán. Los oficiales se desplazaron hasta dicha ciudad y lograron ubicar el vehículo.
El hallazgo fue notificado al fiscal a cargo, quien ordenó la incautación del vehículo para su devolución al dueño original. El hombre que tenía la camioneta fue apercibido conforme al artículo 26 del Código Procesal Penal y quedó en calidad de imputado por el delito de receptación, a la espera de citación por parte de la Fiscalía.