Los superintendentes de los cuerpos de bomberos de Rancagua, Requínoa y Coinco recibieron las llaves de sus nuevos carros cisterna, entregadas por el gobernador regional Pablo Silva Amaya. Estos vehículos, adquiridos con recursos del gobierno regional, son parte de un proyecto que contempla la compra de 23 unidades similares para toda la región.
Con esta entrega, ya se han adquirido 15 carros cisterna, avanzando hacia la meta de equipar a cada comuna con un vehículo de este tipo. El gobernador destacó que este esfuerzo es parte de las medidas de seguridad pública, resaltando que la región de O’Higgins es la que más invierte en equipamiento para bomberos a nivel nacional.
Los nuevos vehículos cuentan con una capacidad de 10,000 litros de agua y doble cabina, lo que permite transportar personal y mejorar la capacidad de respuesta ante emergencias. Además de su función de abastecimiento, estos carros están diseñados para adaptarse a las particularidades del terreno y pueden ser utilizados como máquinas de primer ataque, mejorando notablemente la operación de bomberos en situaciones críticas.